Todos hemos hecho alguna vez propósitos para el año nuevo: dejar de fumar, hacer más deporte, ahorrar más, cultivar nuestra paciencia… Esto sugiere que el calendario tiene un poderoso efecto sobre nuestras posibilidades de cambiar con éxito. Los inicios son poderosos, asà que aprovecha los primeros dÃas del 2016 para conseguir tus cambios.
A nuestro cerebro le encanta ahorrar energÃa, por eso le apasionan lo hábitos. Los hábitos que no nos gustan son muy resistentes al cambio pero los buenos hábitos , una vez se establecen, son tan difÃciles de eliminar como los malos hábitos.
Algunos consejos para que no se resistan tus metas:
1. Concreta, reduce, simplifica.
Un objetivo ambiguo nos dará resultados ambiguos. Por ejemplo, la meta “voy a hacer más ejercicio este año” es un tanto amplia y abstracta, ¿Cuánto es más ejercicio? ¿Cuántas horas a la semana? ¿En que momento del dÃa?¿Cómo se si lo estoy cumpliendo?
Lo ideal es trabajar sobre metas concretas pero, tampoco me valen objetivos inalcanzables como “Voy a ir al gimnasio 3 horas diarias”. Por mucho que esa sea tu meta a largo plazo parece difÃcil que pases de nada a cien sin dificultad. Empieza por algo pequeño, algo que creas que puedes mantener tipo “Voy a ir al gimnasio todas las semanas”
Y permÃtete ser flexible, aunque ajustes tu objetivo no seas demasiado duro contigo mismo, porque si no ante el primer tropiezo tendrás ganas de tirar la toalla.
2. El que mucho abarca…
A veces (la mayorÃa de las veces) es mejor centrarse en una sola conducta de todas las que deseo cambiar. Por ejemplo, este año “quiero ser más paciente”. Solo eso.
Si no he cambiado antes un hábito que no me gusta es precisamente porque los hábitos llevan mucho tiempo instaurados y tienen mucha fuerza. También suelen necesitar tiempo y esfuerzo para ser sustituidos por otros. Y, muchas veces, tenemos una lista tan larga de propósitos, que no soy capaz de centrarme. Si tu propósito es importante, te mereces dedicar ese tiempo a intentarlo.
3. Comparte
Habla con otras personas de lo que te propones hacer, pÃdeles su apoyo, únete a un grupo, hazlo con un amigo… La investigación muestra que el apoyo social es un gran empuje para lograr nuestros objetivos.
Te propongo que lleves la idea un poco más lejos y busques a alguien a quien “rendir cuentas”, busca un amigo que te pregunte y se preocupe frecuentemente por tus avances. Te ayudará.
4. No te rindas
La perfección es inalcanzable y los errores forman parte de nuestro camino hacia el éxito. El secreto para cambiar un hábito es la repetición. Si quieres cambiar un hábito repite, repite, repite, repite y vuelve a repetir.
Cuando creas que has fracasado analiza el tropiezo, encuentra que has hecho bien y que has hecho mal, reévalua y vuelve al ataque. No puedes conseguirlo a la primera precisamente por las caracterÃsticas propias de un hábito. Sigue intentándolo.
Te propongo que recicles tus propósitos del 2015 si no los conseguiste y consideras que aún son importantes para ti. Y ya sabes, repite, cada vez que consigues comer fruta un solo dÃa estás más cerca de tu objetivo de hacerlo todos los dÃas.
5. Revisa tus metas
Merece la pena revisar nuestro objetivo cada cierto tiempo y mejor si no es de año en año. Establece fechas en el calendario para sentarte a reflexionar sobre el estado de tus objetivos: ¿Lo estoy consiguiendo? ¿Sigue siendo importante para mi? ¿Que cosas he hecho que me han ayudado? ¿Que barreras he encontrado?
Es muy común a la hora de hacer cambios que nos ahoguemos en un mar de excusas. No cambio porque no tengo tiempo, dinero, energÃa, problemas familiares… Esto es obvio, si cambiar fuese fácil ya lo habrÃas hecho pero, focalizarte en los obstáculos no ayuda. A partir de ahora busca soluciones a esas barreras para el cambio, elabora planes de acción y muévete.
6. Limpia tu mente y tu vida.
Hay un problema con los nuevos propósitos, o más bien dos, puede que no haya sitio para ellos, si lo que buscamos es, por ejemplo ir al gimnasio, o que no sepamos con que llenar ese hueco, si lo que queremos es dejar de fumar.
En el primer caso necesitamos tiempo y nuestra vida suele estar tan abarrotada de cosas (compromisos, tareas, proyectos que no nos interesan, actividades vacÃas, personas que no merecen la pena) que no nos deja espacio para aquello que nos hemos propuesto. Asà que, además de plantearte que quieres conseguir en el 2016, planteate que cosas vas a abandonar: ordena tu casa, termina proyectos, deshazte de trastos viejos, abandona relaciones que te roben energÃa, deja de ver la televisión, no inviertas tiempo en enfadarte, etc.
En el segundo caso, suele ocurrir que, cuando abandonamos un hábito no sabemos que hacer con ese tiempo y eso es una bomba de relojerÃa. Asà que, si quieres por ejemplo dejar de fumar, decide a que vas a dedicar ese nuevo tiempo. Busca nuevas aficiones, ejercicios de relajación o actividades agradables que llenen esos momentos.
6. Si te sientes abrumado, pide ayuda.
Un profesional puede ayudarte a conseguir tus metas. Si quieres ponerte en contacto conmigo puedes hacerlo aquÃ. Si quieres consultar alguna duda también puedes hacerlo a través del consultorio online.
Feliz año nuevo, que todos tus objetivos se hagan realidad
Más información
Nuestro cerebro y los hábitos
Video – El proceso del cambio