LAS CLAVES DE LA INFELICIDAD

Para ser feliz no importan tanto las circunstancias como nuestra actitud personal. Lo mismo ocurre con la infelicidad, si practicamos diariamente la actitud adecuada, poco importarán las circunstancias y los eventos felices que nos ocurran, tendremos garantizada la infelicidad.
Las situaciones que se describen a continuación pueden ser peligrosas para su salud mental ¡No intente hacer esto en su casa!
 

1. Busca problemas

Si no tienes suficiente con los tuyos, asume los de los demás. Llena tu vida de complicaciones reales o ficticias y procura dar mucha importancia a los sucesos negativos. Por supuesto, no olvides quejarte, pero no hagas nada al respecto.

2. Viva la obsesión

Elige algo que te halla marcado y repítelo en tu mente una y otra vez hasta que solo vivas para pensar en eso.

3. Piensa solo en el futuro

Repasa cuidadosamente todas las desgracias que podrían ocurrir y preocúpate mucho al respecto, dándole vueltas en la cabeza sin parar. Aunque esté en tu mano, no hagas nada por evitarlo. Aplaza los placeres y la alegría para el futuro.

4. Compárate siempre con los demás

Esta es una forma muy efectiva de lograr la infelicidad. Concéntrate en lo que crees que los demás tienen y tu careces, te mantendrá en un estado permanente de frustración y además te impedirá disfrutar de lo que sí posees.

5. Nunca te perdones

Si es difícil perdonar a los demás, perdonarse a uno mismo es mucho más complicado, asi que no te esfuerces en conseguirlo. Piensa que tu eres el único responsable de lo que ocurre y jamás creas que hay situaciones que escapan a tu control.

6. ¡Aíslate!

No prestes atención a aquellas personas que te rodean. Ignora a aquellos que te quieren y se preocupan por ti. No hagas esfuerzos por conocer gente nueva, dirige tus esfuerzos a quedarte solo.

7. Recuerda tus errores

Repásalos una y otra vez, no te des tregua. Has conseguido un montón de cosas en tu vida pero céntrate en lo malo, en todo lo que ha salido mal. Vive en el pasado.

8. No defiendas tus derechos ni tus opiniones.

Quédate callado. Permite que los demás te avasallen, deja que pisen tus derechos, nunca jamás des tu opinión.

9. La vida es algo muy serio, ¡evita reírte!

La vida no es asunto de risa. Reírse sin ninguna razón es un acto irresponsable y frívolo. Si el objetivo es amargarse la vida, no hay espacio para la risa. Serás muy infeliz pero serás una persona seria.