Entrevista de Trabajo

No hay recetas ni trucos que garanticen 100% el éxito de un candidato en una entrevista de trabajo. Sin embargo, si hay unas recomendaciones generales que pueden ayudarnos.

Cuida tu aspecto y sé puntual.

Tenemos que ser conscientes de que el aspecto físico es importante. Sin embargo, en la mayoría de los casos no es aconsejable destacar, por lo que la elección más adecuada es ropa de corte clásico y aspecto limpio.
 

Busca información sobre la empresa

Es una pregunta típica que puede abrir cualquier entrevista de trabajo y puede ser interesante llevar preparado el tema. Siempre es buena idea tener una idea aproximada de la empresa, sus valores, perfil…Piensa porque te gustaría trabajar en la empresa, porque te interesa ese puesto, que te capacita para llevarlo a cabo con éxito, etc

Curriculum

Debemos llevar nuestro curriculum bien preparado a la entrevista y ser capaz de sintetizarlo, resaltando los aspectos más relevantes y nuestros puntos fuertes. Prepara también las preguntas que puedan realizar en relación con tu  formación y experiencia.

Idiomas

Es frecuente que si en un puesto de trabajo nos piden un nivel determinado de idiomas tengamos que demostrarlo en la entrevista, de modo que no tienen ningún sentido mentir en el curriculum. También puede ser importante prepararse la entrevista tanto en español como en ingles para no quedarnos en blanco.

Actitud y Lenguaje Corporal

Es normal estar nervioso en una entrevista de trabajo, pero no queremos que los nervios nos jueguen una mala pasada. Para evitarlo es bueno preparar la entrevista y respirar profundamente.
Mantén el contacto visual, especialmente cuando el entrevistador te está hablando. Si te resulta complicado puedes limitarte a fijar la mirada en su frente, para él no habrá diferencia.

Haz privados tus perfiles

Quizás es algo que no hace falta decir pero, por si acaso…la mayoría de los entrevistadores buscarán información en internet sobre sus candidatos. Por tanto, salvo que sea un perfil profesional, hazlo privado.

Por último, se tu mismo.

En general es bueno llevar preparada la entrevista pero, muchas veces olvidamos la naturalidad. Un poco de frescura, sinceridad y espontaneidad es de agradecer. Recuerda que tienes que diferenciarte del resto de candidatos.