“No aguanto a la familia de mi pareja”
Esa es una de las quejas que oigo más a menudo. Y no solo en consulta, también en la vida cotidiana. Yo con razón, porque la relación con la familia polÃtica es, con frecuencia, una de las más complejas que podemos establecer. Y eso explica porque existen tantos chistes de suegras.
Familia de origen
Una vez que estableces una relación de pareja más o menos estable, empiezas a formar parte de otra familia y, en muchos casos, supone un esfuerzo comprender sus costumbres, educación y estilo de vida. Un esfuerzo que, si quieres que tu relación de pareja funcione, tendrás que hacer.
En una pareja cada uno es, como suele decirse, “de su padre y de su madre” y es necesario establecer acuerdos y ciertos limites para que no surjan problemas. Puede que parezca un poco radical pero poner limites fortalece las familias y, lo que es mas importante, tu relacion de pareja.
Algunos conflictos se agraban cuando la pareja araviesa un cambio como puede ser el nacimiento de un hijo (mudanza, cambio de trabajo, etc). En estos momentos, la relacion de pareja debe reajustarse y las familias de origen pueden añadir, sin pretenderlo, mas tensión en la pareja.
Ejemplos de situaciones comunes que pueden experimentarse son, por ejemplo, que los suegros se presenten en casa sin avisar, que no cumplan o respeten (incluso desvaloricen) los deseos de los padres en la educacion de los hijos, que en una discusion un miembro de la pareja se posicione abiertamente del lado de sus padres, criticar a los suegros, etc.
Si te ver reflejado en alguno de estos ejemplos, quizas estos consejos generales puedan servir de ayuda.
Consejos generales:
1. Acéptalos como son. Muestra respeto a sus costumbres y su forma de vida, aunque no sean las tuyas. Al fin y al cabo, te has enamorado de alguien que ha sido educado en esa familia, con esos valores.
2. Ponte siempre del lado de tu pareja. Este es el consejo que mejor me funciona en consulta. Eso no quiere decir que no puedas negociar o exponer tus puntos de vista sobre la relación que tiene con tu familia, pero en tu casa. De puertas para afuera, por muy duro y doloroso que resulte, lo más efectivo para acabar con los conflictos es posicionarte junto a tu conyuge. Hay que recordar que una de las tareas basicas en una relacion de pareja es crear un fuerte sentido de union y solidaridad entre sus miembros
3. No compares tu familia con la de tu pareja. Ninguna es mejor que otra, incluso aunque lo parezca y, como suele decirse, ” en todas las casas cuecen habas”. Incluso si tu pareja se queja o critica actitudes de su familia, no te unas, no va a hacer ningún bien.
4. Pon lÃmites a tu familia. Hazles entender que, aunque valoras su opinión y su apoyo, no quieres que se entrometan en tu relación. Cada uno debe poner los lÃmites a su familia, después de haberlo consensuado entre los dos. Y de nada sirve decir “A mi pareja le parece mal que vengáis a casa sin avisar…”, lo adecuado es “Creemos que deberÃais llamar antes de venir a casa”
Aunque los casos descritos pueden ser muy comunes, lo cierto es que todas las parejas necesitan tiempo para madurar y crecer, por lo que mi recomendacion es que si te sientes identificado, hables con tu pareja, e intenteis solucionar la situación siguiendo estos consejos generales. Si, aún asÃ, la situacion no mejora, consulta a un psicologo de pareja, tu relación y tu satisfacción personal mejorarán considerablemente.